Infertilidad: un problema al alza con varias soluciones

Por Nayeli Rueda

¿Tu pareja y tú llevan meses intentando embarazarse y no lo logran? No te angusties, esto no significa que tienen que ir urgentemente con un especialista en reproducción humana y someterse a costosos tratamientos de reproducción asistida, como la Inseminación Artificial (IA) o la Fecundación In Vitro (FIV), pues “un gran número de problemas de infertilidad, tanto masculina como femenina, pueden solucionarse en la consulta ginecológica”, señala el Dr. Alfredo Ramírez Cárdenas, ginecobstetra de la Unidad de Medicina Materno Fetal, en la Ciudad de México.

El experto Ramírez Cárdenas, médico certificado en la Especialidad de Medicina Materno Fetal por el Consejo Mexicano de Ginecología y Obstetricia, aconseja a las parejas que desean embarazarse acudir a una consulta preconcepcional para conocer el estado de salud de ambos. Si después de un año no logran concebir, lo que sigue es realizar pruebas complementarias y comenzar a estudiar a la pareja, para descartar que la mujer tenga algún problema en útero y ovarios o que el hombre tenga problemas de disfunción eréctil o de eyaculación precoz.

De acuerdo con la Secretaría de Salud, la infertilidad es “la incapacidad de lograr el embarazo después de tener relaciones sexuales regularmente, y sin uso de anticonceptivos, durante un año”.

Las causas

La infertilidad es un problema de salud que, según estimaciones de la Asociación Mexicana de Medicina de la Reproducción, va en aumento por circunstancias como el estrés, el consumo de alcohol y tabaco, la mala alimentación y la postergación de la maternidad, además de factores genéticos y hormonales.

Entre las principales causas de infertilidad femenina se encuentra la endometriosis, que afecta la calidad de vida de 7 millones de mexicanas, según datos de la OMS. Otras razones son problemas:

  • Anatómicos, como la forma del útero, fibromas uterinos o síndrome de ovario poliquístico.
  • Endocrinológicos, que son aquellas situaciones que tienen que ver con los trastornos hormonales, baja reserva ovárica, entre otros.
  • Inmunológicos, es decir, si existe una enfermedad previa que no se ha diagnosticado.
  • Genéticos, que son causados por una alteración en la secuencia de ADN de la mujer o del hombre.

Infertilidad masculina

Para investigar las causas de la infertilidad masculina se hace una muestra de semen; con ellas se estudia la calidad y cantidad de los espermatozoides. También se indaga si hay eyaculación precoz. Si fuera necesario, se piden estudios complementarios para descartar fibrosis quística o una obstrucción en los testículos.

Los problemas de infertilidad se dividen en baja y alta complejidad. Las técnicas para el manejo de la infertilidad de baja complejidad las puede resolver, en su gran mayoría, el ginecólogo, quien podrá hacer algunas sugerencias, como tener relaciones sexuales programadas y en los días fértiles de la mujer.

A veces, analizando cómo es la actividad sexual de la pareja se puede resolver el problema: si hay coito interrumpido o si el hombre eyacula fuera de la vagina, apunta el especialista Ramírez Cárdenas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado a la infertilidad como una enfermedad debido a que tiene repercusiones en los ámbitos social, familiar, psicológico y económico.

Si en el tratamiento básico no se consigue concebir, entonces se canaliza a la pareja con un especialista en reproducción humana. “Los avances tecnológicos han permitido identificar las causas de la infertilidad y proponer un tratamiento a la pareja, que puede ir de lo más sencillo a lo más complejo”, opina el ginecobstetra.

Si una pareja tuviera que acudir con un biólogo de la reproducción “es muy importante que investigue con su médico cuál es la tasa de éxito y qué riesgos y complicaciones se pueden derivar de una fecundación in vitro”, finaliza.

En México la infertilidad afecta a mujeres y hombres por igual, en un 40 por ciento, respectivamente 10 por ciento se debe a causas mixtas y el 10 por ciento restante es inexplicable.

Instituto Nacional de Perinatología (INPer).